Federico y Mary de Dinamarca han exprimido hasta el último minuto la breve pero intensa visita a Suecia en su primera gira internacional como Reyes. A bordo del buque real Dannebrog, la imponente embarcación ha sido también un elemento clave del viaje con el que honran una antigua tradición de la corona danesa. Además de servir de hotel para el monarca y su esposa también ha sido escenario de un evento privado en honor a la familia real sueca en agradecimiento a la cálida acogida que les han brindado. Con una segunda y última jornada tan intensa como la primera -y en la que ha llamado la atención el pequeño derrame que presentaba la reina Mary en el ojo- han puesto el broche a su estancia en Estocolmo.
Se trata de una pequeña hemorragia en el ojo izquierdo que ya se podía apreciar en los actos del lunes, pero que ha sido hoy cuando las cámaras la han captado de forma más evidente. Aunque dado su escaso tamaño no parece preocupante, la casa real danesa ha declinado dar explicaciones sobre su causa. Coincide que a Silvia de Suecia también le ocurrió algo similar hace unas semanas, aunque en su caso era más impactante ya que le cubría practicamente toda la córnea. Aún así, no se trataba de ninguna dolencia importante, tal y como explicó la responsable de información de la casa real sueca, que aseguró que se debía a los cambios de temperatura entre el exterior y el interior de los edificios.
Al margen de este detalle, ambas reinas comenzaron el día con una visita al museo Príncipe Eugens Waldemarsudde. Allí disfrutaron de una exposición de la artista plástica danesa Marie Kroyer mientras los monarcas se enfudaban en sus uniformes miliatares para visitar al regimiento anfibio de Estocolmo. Tras sus compromisos por separado, los cuatro reyes se unieron en un almuerzo oficial en el ayuntamiento de la ciudad al que se sumaron Victoria y Daniel de Suecia y los príncipes Carlos Felipe y Sofía, entre otros invitados.
Federico y Mary de Dinamarca conceden su primera entrevista como Reyes
La tarde la dedicaron a la ciencia con una visita al centro de ciencias biológicas de Estocolmo que incluía una mesa redonda sobre cómo la inteligencia artificial afecta a este campo científico. La siguiente parada de este intenso día fue el Múseo Nórdico de la capital sueca que recorrieron junto a los reyes y los príncipes herederos suecos y que culminó con Federico y Mary de Dinamarca plantando un manzano en el patio. Se trata de un regalo del rey Carlos Gustavo que simboliza la excelente relación entre ambos países.
El colofón del día y de la primera visita de Estado de los reyes daneses ha sido, por un lado, la despedida que organizaron en el buque real para agradecer a los anfitriones su recibimiento y, por otro, la que ofrecieron los Bernadotte a sus invitados en el Palacio Real.
