La temporada de bodas no ha hecho más que comenzar y, al contrario de lo que predecían los expertos, que vaticinaban un descenso del número de enlaces, la primavera de 2024 está tan repleta de estas celebraciones como sucediera en años anteriores. Tanto que los matrimonios se celebran en días menos habituales, como domingos… o miércoles. Así ha sido en el caso de Javier García Obregón, el hijo del empresario y Paloma Lago, que hoy 1 de mayo se ha dado el “sí quiero” con la psicóloga Eugenia Gil Muñoz. La iglesia San Fermín de los Navarros, en el madrileño barrio de Chamberí, ha sido el templo escogido, y a sus puertas hemos visto, además de a los familiares de Ana García Obregón, a muchos rostros conocidos de nuestro país como la periodista Marta Robles o la experta en moda y lujo Nuria March. Ella ha sido una de las invitadas más elegantes con un look con claras referencias a uno de los iconos de estilo que más admiramos, Diana de Gales.
– Looks de invitada ‘made in Spain’ ideales para bodas de primavera, bautizos o ferias
Acompañada por su marido, el financero Don Johnston, la empresaria Nuria March era una de las primeras asistentes en llegar a este enlace que ya se ha convertido en uno de los más especiales de la temporada. Y sobre todo a nivel de moda, pues tanto Paloma Lago como la novia se han convertido en referentes con sus espectaculares vestidos de Alta Costura firmados por AnmarGo. Más discreto pero igual de elegante ha sido el estilismo escogido por Nuria March: un conjunto de chaqueta torera y vestido con falda evasé con grandes lunares blancos sobre fondo azul noche.
La consultora de comunicación ha completado el sobrio dos piezas con un precioso choker de cuatro líneas de perlas, un bolso de aire vintage negro, zapatos destalonados con hebilla blanca y una gran pamela de rafia ladeada sobre un moño bajo. Un detalle que, en combinación con el traje de lunares, nos ha recordado a algunos de los looks de invitada más admirados de Lady Di.
La inspiración que nunca pasa de moda
Fueron muchas las ocasiones en las que Diana de Gales lució diseños con estampado de topos. Por ejemplo, lo hizo en el Derby de Epsom en junio de 1986 (en la imagen superior), donde defendió con maestría un conjunto blanco con lunares negros. También en una ceremonía en Nijo Castle, Kyoto, en un viaje en mayo del mismo año a Japón (imagen inferior), donde, en una suerte de guiño a la bandera del país, escogió un vestido blanco y rojo con el mismo estampado. En estas citas, y en otras tantas, completó el look con sombreros ladeados, igual que hoy ha hecho Nuria March en la boda.
